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Todos los textos guardan derecho de autor;
Cualquier relacion con la realidad es pura coincidencia; los textos no son dedicados a nadie, y no soy la protagonista de ninguno (o casi ninguno).


Nada de lo que leas acá, es verdad.
Delirá.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Dueño de mi

Bien, seamos sinceros, 'te quiero' no se le dice a cualquiera. Me lo enseñaste vos, hace ya algún tiempo. Pense que era válido no solo para mi, sino para todos (te incluyo). Ahora creo que vos eras la excepción. Siempre sos una excepción a tus reproches y a tus excusas. Debe ser solo porque sos vos, como si fueras del más allá, o algún ser extraño liberado del mal. Sí, como no.
Me enseñaste que a veces es bueno escuchar la mentira, cerrar los ojos y dejarte llevar. Pero siempre hubo un problema, cada vez que los abria, me estampaba contra una pared. Y dolia, mucho, muchisimo. Así que tus mentiras, me hacían bien por un rato. Era como si me llevaras a volar, pero al abrir los ojos, me soltaras. Me veía cayendo al vacío. Pero claro, la culpable era yo. Porque ¡ para qué abria los ojos !. ¿Para no ser una estúpida, y vivir en tus mentiras por una eternidad? Sería una buena respuesta. Pero no, en vez de eso, yo pedía perdon.
Volvamos a lo anterior, 'te quiero' no se le dice a cualquiera. Y yo medía casi con regla a quien regalarle un 'te quiero' y a quién no. Casi que al final, vos elegías las personas a quienes debía decirselo. Ah, y por supuesto que el circulo eran solo figuras femeninas. Pero yo lo entendía, vos me explicabas 'a un hombre no se le puede decir Te Quiero, a menos que sea tu novio, sino andá a saber que se piensa'. Que hijo de remil puta que eras. Y vos ibas por la vida, diciendo 'te quiero'. Y no solo a mí, no ovbio, que aburrido. El circulo de personas que recibian tus Te quiero, también era de mujeres 'Como el tuyo!', te justificabas.
Que dificil era complacerte, y ver que yo no era única en tu vida. A veces me resultaban divertidas tus mentiras, al menos sonreía un poco. Aunque fuese una vez al mes. Controlabas mi vida, y te me reias por detrás. Yo me daba cuenta, pero me convencías cada vez que hacías algo mal. Era triste, sí. Pero aprendí.
Hoy, mi vida es mia.
Mi corazón es mío.
No comparto.
No confio.
Soy feliz.

martes, 28 de julio de 2009

Estamos apestadas

Hace días que estoy pensando en esto, y por fin llegué a una conclusión. Me arte de las frases que hablan de la "Señora Vida", como si la vida fuese una mujer. Una más de nosotras. Pero por favor. La vida es complicada y muchas veces triste. ¿Cuántas veces decimos: ¡Que vida de mierda!? Un millón al año. En la vida se sufre, no la elegimos nosotros. La vida te ve, viene, te toca, y sea o no para vos, sea buena o no, se queda ahí, con vos. Y te ve llorar, no hace nada, y es la culpable. La vida tiene cosas buenas y malas. A veces, si la vida tuviese cuerpo, la matarias. ¿Cuántas veces quisieramos cambiar de vida? Un montón, pero es por un rato, porque después te vuelve a conquistar. Y te olvidas de todo lo malo. Ese don que tiene, ¿No te suena?. La vida llega y se va cuando quiere. No te podés olvidar nunca de que tenés una vida. Es hermosa. Te seduce día a día, y en cualquier momento te caga.
Mujeres, ¿Qué duda les queda? La vida es HOMBRE. Volvé a leer todo, y reemplaza "La vida" por "El hombre".
El hombre es complicado. El hombre viene, se queda, sea o no para vos, a vos te tocó.El hombre te ve llorar, no hace nada, y es el culpable. El hombre tiene cosas buenas y malas. ¿Cúantas veces quisieramos cambiar de hombre? UN MONTÓN, pero es por un rato, porque después te vuelve a conquistar. Te seduce día a día, y en cualquier momento te caga. ¿Cuántas veces decimos ¡Que hombre de mierda!? Un millón.
Sí, la vida es un hombre. Es un hombre disfrazado de MUJER: todos queremos vivir. Pero cuando vivimos, y nos damos cuenta de lo que es (un hombre), queremos salir corriendo.

miércoles, 1 de julio de 2009

Hey guys

No me importa, yo no soy como ella. No soy como ellas, puede gustarte o no. Pero soy diferente. Y no las odio, las detesto. Procuro quedarme a tu lado, con condiciones. Estoy harta de jugar sus juegos, malditos hombres. Tengo mis propias reglas, y en esto mado yo. Podría quererte, pero nunca lo creerías. No es que sea demasiado cerrada. Es que vos, ustedes, no hacen mas que daño. Y yo ya no estoy para eso. Me prometí invertir lo papeles, pero no soy tan mala. Procuro no hacerlos sufrir. Voy a conquistarte, te vas a enamorar, caerás rendido a mis pies mi amor. Pero cuando quieras atacarme, tendre mi escudo. Ahora bien, si no te gusta, andá, corre, buscá a esas perras baratas, cada dos pasos encontras a 5. Hay muchas, si. Pero como yo, hay pocas. No pretendo hacerte daño, pero nunca dejaría que me toques con esas sucias manos. Deberias mostrarme que eres diferente. Yo soy diferente. Vos también podes serlo. Y prometo ser tuya para siempre. Pero sí, claro. Son todos iguales. 'Siempre cambiando, no cambian más'. Dios. Hay hombres tan despreciables, que con un beso se vuelven tan .. tan únicos. Pobre de mí, ¿Únicos?, eso no existe. Pateticos, e insignificantes es la palabra perfecta para esa raza. ¿Cómo es que pueden hacerlo? ¿Cómo pueden ser tan frios? ¿Cómo es que pueden hacer tanto daño?. No los entiendo. Pero las cosas van a cambiar querido. Vas a amarme, a sentirme, y no voy a salir corriendo, simplemente no voy a ser solo tuya. Vas a sentir lo que es, ser uno más del monton, cuando estabas convencido de que eras el Único. Sí, como no.
¿Preparado? Listo, ya. ¡It's rainign man!

jueves, 18 de junio de 2009

Es un pedido

Recuerdo que cuando te fuiste dijiste que quizá seguirías pensando en mi. Yo te dije que ya nunca más volveria a hablar de vos. Pero nada fue así. Era de esperar, hago todo al revés. Pronto te olvidaste de mi, y yo nunca dejé de hablar de vos. Sos un caso perdido en mi cabeza. Ya ni siquiera puedo evadirte, te aparecés como sin nada, sin previo aviso, sin que yo te huebiese llamado. Te pienso y me duele la panza, te siento y quiero salir corriendo. Pero no, esa parte te tocó a vos, la de salir corriendo digo. Nunca entendiste nada, te costo demasiado. Te fuiste, asi como así. Porque sí, sin explicación. Y sabes? Me importó. Aunque nunca te lo conté. Te hice ver que eras mi mundo, todo para mí. Yo no te pedí nada, te deje ser, me quede cerca tuyo por si a caso. No te pedí nada, no lo entendiste. No entendiste, que yo te quería a vos y a nada más. Te fuiste corriedo, te escapaste de mí. Y esta vez fuiste vos el que me asustó. Ahora tengo miedo, le temo a la vida, a los hombres, incluso a mis amigas. Puedo salir y gritar que me hiciste daño, y no mentiria ni un poco. No quisiera que expliques, no entiendo tus porqué, tus excusas ni tus razones. No te reprocho, pero hoy ya no quiero entender. Si puedieras irte, ahora, ya mismo. Dejar mi cabeza en paz, por favor. Andate y deja lugar, dejame vivir, dejame lugar para mi. Te fuiste, a medias. Alejate, entero. Ya no quiero escucharte, no quiero siquiera recordarte. Te necesito. Lejos. Te necesito muy lejos. No me hagas mas daño, ya no te sirve de nada.

martes, 16 de junio de 2009

Fury

La furia me aleja, la furia me hierve. Por culpa de la furia, perdí mi cabeza. Todo lo grande, de pronto se achicó. No queda nada, excepto vos y yo. No te preocupes, esto no pasó. Yo me voy, harta de tu sinceridad, mi mente ya no esta cuerda. La soltaste vos, y ahora me voy. No sé si agradecerte, o esupirte por dejarme ir. Pero ya no pienso, me voy, para siempre. Me quedo cerca, nunca pude alejarme. Estoy aca, lejos de vos. No tengo nada en la cabeza, mi sangre esta fria, congelada. No siento, no veo, no escucho, te odio. Te quise, te amo, pero ahora me voy. No te preocupes, no mas mentiras. Podrás vivir tranquilo, ocultándote de vos mismo. No te encontraba, y cuando lo hice, estabas amarillo, podrido de tantas mentiras. Quise alejarme. Y Acá estoy, cerca de mi, muy lejos de vos. Solíamos abrazarnos, que error. Nunca te quise, siempre me odiaste. Lo hacias por vos, para vos y con vos. Mientras yo te miraba. Creias que acaso algo me importabas. Que tarado, me reía de vos. Siempre fuiste patético. No te sientas mal, te amo, no puedo olvidarte. Pero me voy, no puedo verte mas. Descuida, no voy a hacerte daño. Soy una buena mujer, siempre fui una buena amante. Ya no te preocupes, puedes mostrarte a la luz. Si no te asustas claro, ya no estoy acá, ya no estoy con vos.
Me fui conmigo, por ahí, muy cerca de vos.

jueves, 11 de junio de 2009

Who I am?

Tengo 16 años. Odio dormir la siesta, me cansa. No me gusta que la gente duerma siesta. Generalmente tengo buen humor. Amo hacer teatro. Me gusta que llueva los viernes. Cuando escribo, lo hago con música lenta, tranquila e internacional. Descubrí que no me disgusta la música clásica. Odio las novelas típicas de “alguien quiere estar con alguien, pero siempre uno tiene una novia mala, y la muy hija de puta inventa un embarazo”, que patético. Veo “Trátame Bien” por internet. Cambie mucho desde el año pasado. Me relaja mucho escribir cuando no hay nadie en casa. Me encanta leer. Amo los libros feministas. Me encanta ser mujer. Me divierte mucho hacer test o completar esas preguntas “personales” que aparecen en internet. Llego siempre media hora tarde (o más). Me gusta que la gente opine sobre lo que escribo. Siempre pensé que estoy loca, muy loca, pero que no se me nota. Me gustaría empujar a alguien al vacio, pero no me animaría. Creo que en mi otra vida, fui una reina o princesa. Sueño con ser una muy buena abogada y tener una casa hermosa con piso de madera. No me importa si me caso o no, si tengo hijos o no. Me molesta que la gente cuente todo. Creo que soy una buena amiga, me preocupa la gente. Quisiera ayudar a todo el mundo, pero como me dijeron “no soy un superhéroe”. Soy muy racional. Evito todo lo que me pueda “hacer mal”. No lloro nunca. Creo que soy muy fuerte, y por ahí eso no esta bien. Quisiera tener mucha plata para hacer tantas cosas! Me enamoré de Kurt Cobain cuando vi un documental sobre él. Me hubiese gustado ser su novia. Amo la gente loca, creo que es la más normal. Hablo hasta por los codos. A veces siento la necesidad de discutir. Cuando quiero algo, lo consigo. No soy caprichosa (eso era antes). Descubrí que soy paciente en algunos casos. Me encanta leer en vos alta. Darle clases a la gente (a mis compañeros). Odio tener las uñas despintadas. Me preocupa que la gente no hable. Soy muy sincera y digo todo lo que me parece, duela o no. Quiero tener el pelo muy largo. Me gusta mucho regalar cosas. Me encanta leer cosas que escribe la gente en sus blogs. O que me cuenten historias ajenas. Siempre invento las obras en teatro. Tengo una gran imaginación. Puedo convencer a la gente de lo que sea. Nunca nadie se daría cuenta de si estoy mintiendo. Odio (y me dan mucho asco) los remiseros que tiran besos (por dios, ¡tienen familia!). Me molesta mucho, mucho que los hombres sean tan pajeros. No me gusta que la gente tenga las manos ásperas. Mi habitación es un desastre universal, aunque odie el quilombo. Me molesta que me interrumpan o no me dejen hablar. Me gusta mucho sacar fotos, filmar, y delirarme imaginando cortos o clips, cuando me acuesto. Me encanta soñar. Me parece estúpida la gente que habla de otros. Odio a los violadores. Me gustaría que existiese la pena de muerte, solo si yo fuese la presidenta o la jueza del caso. Creo que no debería existir la diferencia social. Me gusta Luis Miguel (prohibido reírse). Siempre soñé con ser famosa, y ser la novia de un rockstar hermoso, o de Johnny Deep. Me hubiese gustado vivir en los ’80 o en la época antigua, donde usaban esos vestidos gigantes y peinados raros, y los hombres pelucas. Siempre me doy por sobreentendida. Si no tengo ganas de hablar, no hablo, y no me hables, date cuenta. Me dan ganas de putear cuando la gente me habla apenas me levanto. Odio levantarme y tener que ir a tomar la leche al comedor. Por suerte tengo un súperpa que me lleva la leche a la cama everyday. Siempre pienso que todo lo que pasa, pasa porque tenía que pasar. Creo en el destino y en la vida después de la muerte. Soy muy, muy, intuitiva. Me doy cuenta al instante de lo que quiere la otra persona. No me gusta limpiar. No se cocinar. Me encanta comprar cosas, lo que sea. Me gustan las letras de Babasónicos, y amo a Emanuel Horvilleur, me casaría con él ahora, ya. Estuve con un famoso, me moria de la alegría, no podía creer que me estaba dando un beso ese chico. Siempre fui muy romántica, ahora muy poco. Aunque todo me parece tierno. Creo que se puede amar/querer y desconfiar. Los celos son mi peor aliado. Me encanta que me busquen, aunque nunca les de bola. Siempre quise hacer una fiesta enorme, muy grande, que dure 2 días. Quiero tener mi propia marca de ropa. Odio la competencia. Me molesta que mi pelo no quede como quiero. Odio los pelos. Me encanta el documental Tarnation. Y nunca va a dejar de gustarme mi libro “Raros Peinados”. Me gusta buscar canciones, e interpretarlas. Me gusta hablar de mí. Quiero pintar de negro una pared de mi cuarto. Tengo millones de peluches, y quiero tener muchos más. Duermo con una vaquita que me regalo Emanuel. Quiero que no me guste el chocolate, pero no hay caso, imposible. Me da tristeza comer pescado, y me da asco. La mejor golosina son los caramelos “Media Hora”, a nadie le gustan, yo los amo. Me encanta ir a comer los viernes a la casa de la abuela de mi mejor amiga. Amo salir con mis amigas, somos un descontrol y es imposible aburrirse. Me gusta mucho viajar. Hace menos de un año que me gusta subirme a los colectivos. Odio esperar. Tengo la autoestima un poco alta. Me encanta andar descalza, con medias. Tengo una mamá esotérica. Creo que la gente que me conoció bien, no me va a olvidar. Durante un año me dediqué a hacer “sufrir” a los hombres, los odiaba porque veía a mis amigas quejarse de ellos. Siempre me dio lo mismo caerle bien a la gente o no. No me gusta tener que irme a dormir. Quiero tener 21. Me quiero comprar un auto. Odio a la gente soberbia, y sabelotodo. Me molesta que la gente llore por nada, hay cosas peores dear. Lo que es mío, es mío y nadie me lo saca. Soy un poco hija de puta, no es que sea mala, pero. Me gustaría tener un cuerpo perfecto, y andaría desnuda por la vida. No soporto que una mujer llore por un hombre. Estoy totalmente convencida de que los hombres son más propensos a morir de amor que las mujeres. Me gusta ser original. No me da vergüenza casi nada. Me encanta pelear con los profesores o el director. Me gustaría a hacerle la vida imposible a la gente mala, o hacerle pasar mucha vergüenza. Me encanta tener muchos anillos. Que me hagan cartas profundas, y me regalen cosas que sean solo para mí (como una bolsa de caramelos Media Hora, por ejemplo). Me gustan las palabras que usa Dárgelos en sus canciones. Me gustaría hablar ingles a la perfección. Me molesta que los días sean tan cortos en invierno. No me gusta la tierra, ni la tiza. Si estoy enojada, la gente se da cuenta al ratito. No me enojo muy fácil, y no me duran los enojos. Me quiero hacer un tatuaje, en la boca (adentro). Quiero vivir sola. Mi sueño es editar mi libro, y que lo compre mucha gente. Amo que las cosas se den naturalmente. No me gusta que me presionen. Soy crítica, y tengo fundamentos, sino me quedo callada. Me colgué escribiendo. Eso es algo de lo que soy!
María Virginia.

sábado, 6 de junio de 2009

No es que no te quiera

Querida mía, desearía tanto aplastarte. Te miro desde arriba y pienso “Pobre! tan estúpida que es .. Yo en su lugar, preferiría estar muerta”. Pero te miro bien, y al final me doy cuenta de que no podría hacerlo. Te aplastaría con ganas, pero sos tan inútil que seguirías viva, renga, fea, demacrada, pero vivita y coleando. Ni para morir servirías. Es en estos momentos que me doy cuenta de lo buena que soy, tan solidaria.. “No te aplasto, porque seguirías viva, aún siendo un insignificante bicho para la humanidad”. No puedo creerlo, deberías agradecerme.
Y no es que no te quiera, es que siento un enorme deseo de aplastarte, de borrarte de este mundo para siempre. Sé que te haría un favor. Estas cansada de sufrir, porque sos imbécil, ya te lo dije “mi querida mosquita muerta”. Te querés matar cada vez que me vez feliz; y sé que no es envidia. Sé muy bien cuanto me admiras, pero así es la vida: “algunos sonríen, mientras otros miran”. O directamente sería, así es tu vida: “yo sonrío, mientras vos mirás”. Pero bueno, como vos decís –Es tu vida- (¡que horror! que vida de mierda).
Te doy un consejo (tómalo o déjalo), no vale la pena seguir intentado. Lo llevas en la sangre, esta en vos. La inutilidad es tu fuerte. Es lo que mejor te sale, vah : ni siquiera eso (sarcasmo).
Yo en tu lugar (a veces me sorprendo a mi misma, no puedo creer cuanta empatía tengo para con vos, teniendo mil cosas mas importantes de las que ocuparme), trataría de irme, lejos. Bien lejos. Fuera de todos. En resumen, me alejaría de este mundo, tan ajeno a vos, para siempre.
Que se yo, esto fue un humilde consejo. Yo en tu lugar, me AUTOAPLASTARIA. Pero como sé que no podes hacerlo (¿Te imaginas tratando de autoaplastarte?, por dios que divertido), te ofrezco mi ayuda.
Hasta nunca.Y no es que no te quiera, a todo esto te lo digo “de onda” (como dicen ahora, viste).

miércoles, 20 de mayo de 2009

Una despedida desesperada

Necesito escribir, quizá sea lo último, necesito decir, que sepas, quiero decirte: que me estoy muriendo. No sé si me estoy mueriendo, suicidando, o me están matando. Prefiero creer que mi asesino fuiste vos. Prefiero hecharte toda la culpa, reirme de tus disculpas y hasta escupirte la cara. Lamentablemente no soy tan fuerte, soy débil, como una mosquita muerta. Ya soy mosquita, ahora necesito ser muerta. Tengo que morir, no encuentro razón alguna para seguir pensando en vos. Y desgraciadamente, es lo único que sé hacer. Me hiciste olvidar lo que era vivir, lo que era vivir sin vos. Ya no encuentro qué hacer, nadie puede ayudarme, ni siquiera yo. Te quiero tan lejos, te odio tanto. Tanto, que ni siquiera quiero compartir mi mundo con vos. Y te vas vos o me voy yo. Me voy yo. Me muero, me suicido, me mataste. Sentite culpable, cortate las venas, deprimite, llorá, sufrí, odiá. Pero, por favor, no te mates. No te mueras. No te quiero acá conmigo. No quiero verte nunca, nunca más. Sería de desequilibrada mental agradecerte que me hayas dejado, y te lo agradezco. Te odiaba, te odié, gracias por irte, gracias por matarme. Fuiste, sos y serás mi más hermoso error. Recuerdo siempre haber dicho que si moría, "moriría de amor por vos". La frase fue casi perfecta. Me estoy muriendo. Me asesinaste, con tu amor. Me muero, por vos, de odio. Agradezco tu colaboración en mi muerte, pero siempre fuiste tan inútil, que tengo que ayudarte un poco, me suicido, así acabo conmigo de una vez por todas. Acabo conmigo, para terminar con vos. Me muero, hasta nunca, nunca. Y no le digas a nadie que lo amo, porque nunca amé a nadie. No te quejes, a eso me lo enseñaste vos.
Adiós.

viernes, 15 de mayo de 2009

Carta para un ciego

Tengo miedo, me das miedo. Te miro, me sonrojo, sos hermoso. Te confieso, que te amo. Te miro, me muero. Rozo tu mano, como por equivocación, y corro el riesgo de derretirme en ese preciso momento. Me desespero por un beso tuyo, un beso que enrealidad es un simple saludo. Me da verguenza, mucha. Te confieso, que me muero. Te quiero.
Y si acaso lo supieras.. Te miro, no puedo creerlo. Te miro, sos hermoso. Como de otro mundo. Diferente a todos. ¿Será tu forma de ver las cosas?
Te miro, tengo miedo. Veo tus ojos, no me ven, estan perdidos.
Te confieso, ahora, que te amo.
Te lo confieso de esta forma. Así no me da verguenza. Te escribo una carta. Para que lo sepas. Para que sepas que te amo. Para que sepas que sos hermoso. Para que sepas que sos ·como de otro mundo·
Te lo escribo en un carta, para que nunca puedas leerlo.
Esta es mi carta,
Una carta para un ciego.

Carta para un ciego (Segunda parte)

Me enamoré de un ciego. De alguien que no puede verme, alguien que simplemente me reconoce.
De alguien que no sabe de que color son mis ojos. Alguien que solamente sabe escucharme.
Me enamoré de alguien que no sabe si soy bonita o no. De alguien, que se enamoró porque solo conoció de mí, todo lo que soy.
Me enamoré de un ciego, por su forma de mirar. Por su forma de mirar las cosas.
Me enamoré de alguien que me enseñó a caminar con las luces apagadas. Me enseño que la vida no es solo como la vemos. Me enamoré de alguien que me enseñó que vivir a la luz de la luna es hermoso.
Un ciego se enamoró de mí, y me enseñó que también se puede amar con los ojos cerrados.

sábado, 18 de abril de 2009

Persecucion a mi cabeza

Mi amor, ¿Sabes donde estoy? Necesito que alguien me lo diga. Estoy perdida. Mi amor, ¿Aún puedes verme?, sabes estoy tranquila. Mi amor, ¿Me reconoces? ¿Sabes quien soy?, tus ojos salieron de órbita, no me mires. Mi amor, ¿Quieres acercarte? por favor, no me toques.
Mi amor, ¿Crees que yo .. crees que yo esté enferma? Mi amor, ¿Me salvarías de la locura?
Dime, mi amor ¿Vendrías conmigo? Mi amor, ¿Te encuentras por acá? ¿Tendré que salir a buscarte?, no tengo ganas de correr. Mi amor, ¿Crees que puedo ganar? hay una persecución a mi cabeza. Mi amor, ¿Crees que me salvaré? no desespero.
Mi amor, ¿Debería esperarte? ¿Me buscarías, si no me encuentras? juguemos. Mi amor, dime ¿Hay algo que debería preocuparme? no me distingo de los problemas. Mi amor, ¿Todavía quieres escucharme?.
Lo siento, hay una persecución a mi cabeza. ¿Debería escapar?

lunes, 13 de abril de 2009

Crónicas de un viaje lejos de vos

Todavía recuerdo la última vez que hable con vos (no fue hace mucho), discutiamos claro. Te decía que estaba cansada de tu ausencia, vos me decías que mi frialdad y poca seriedad eran las culpables de todo; yo las defendía, sabía que me pertenecían.
Nos estabamos separando, o algo asi. Vos estabas enojado, pues yo quería quedarme con el sofá que tu madre nos había regalado cuando decidimos que podiamos vivir juntos (es claro, estabamos cegados por el amor), con el tiempo eso se convertiria en una especie de circo; odiabas mis "caras de nada" según vos, aunque siempre estaba sonriendo, y yo soñaba con tirarte un plato por la cabeza. Un día lo intenté, pero el muy maldito se me resbaló de las manos y cayó justo en frente de mis pies. Vos abriste los ojos como nunca, no supe distinguir si estabas asombrado o enfurecido (creo que estabas asombrado, nuca de enojabas conmigo del todo), me miraste y dijiste: "Vos estas loca, yo me voy". Yo sonreí casi macabramente.
Siempre pensé que odiaba vivir con vos, que estaba arta de las discuciones "diarias", que no soportaria un día mas viviendo con vos.
Hoy que estoy lejos de vos, sé que antes de dormir con un Don Nadie, prefiero pelearte una y mil veces por día, pero estar con vos. Lástima, ya te fuiste.
A veces cuando me ponía a pesar en el tiempo que estuvimos juntos, me resulta irónico extrañarte. ¿Qué es lo extraño? ¿Nuestas discuciones por nada?. Bueno, creo que sí. Como sea, a pesar de todo, no estaba tan mal.
A veces me olvido de tu nombre, por ahí me cuesta recordarlo. Pf, cualquiera. Hago un esfuerzo sobre humano por olvidarlo. De vez en cuando me pregunto si vos te acordás del mío, de mi nombre, yo creo que sí. Después de todo, no debe ser fácil olvidar el nombre de alguien que intentó partirte un plato en la cabeza.
Quizá algún día pienses en volver, yo te quería de verdad eh, creo que vos también.
Desde que te fuiste, sentí el placer de tener "nuestro" hermoso departameto solo para mí sola. Caminaba descalza por toda la casa, pisando los sillones de terciopelo negro con los pies llenos de tierra, escuchaba el CD de Sabina que tanto detestabas a todo volumen, y nadie me decía nada. Era sensacional. Sí, era placentero hacer todo lo que odiabas.
Ahí descubrí lo corto que puede resultar el placer, el muy hijo de puta no me duró ni una semana. A los 5 días ya había hecho de todo, el papel de solterona rebelde me empezaba a aburrir. Ya no escuchaba tus "Baja el volumen de esa cosa, por favor!" o "Te dije mil veces que el terciopelo se ensucia fácil, no lo pises más!", parecías un papá, pero era divertido.
Siempre me cuidabas de todo, yo me hacía la tonta. Si cruzaba la calle sin mirar, era solamente para escucharte para escucharte por enésima vez decirme "Mirá si te pisa un auto estúpida, ¿Qué hago yo?, me muero" yo me reía, y nos abrazabamos. Sí, eras agresivo (me decías estúpida todo el tiempo!) pero yo sabía que eras el más dulce.
Que tarada, me parecías insoportable y me gustabas. Me acuerdo que cuando te ibas a trabajar, yo me quedaba mirándote desde la ventana y haciendote burla. Me resultaba tan graciosa tu forma de caminar, ibas como "pisado fuerte" como decía yo. Que risa me daba imitarte y que te enojes, y me digas que estaba gorda, cuando enrelalidad los dos sabíamos que yo te encantaba. Eras un poco irritable eh. Ahora que miro por la ventana, extraño eso.
Me acuerdo, me rio.
Amaba nuestras reconciliaciones, después de tanto griterío me abrazabas, me hacías cocochito y corrias por todo el departamento. Discutíamos por boludeces, incluso llegamos a discutir porque alguno de los dos había cortado de más el piquito del yogurt, se te había volcado todo y yo me reía. Yo te juraba que habías sido vos el boludo que lo había cortado mal; vos decías que había sido yo. Unos días después me di cuenta de que sí, había sido yo, lo había cortado con una tijera media grando o no sé. Ovbiamente, no te dije nada.
Despues de discutir, seguía el cocochito. Me encantaba, me hacías reir mucho.
Capaz fue eso lo que nos alejó. Yo vivía sonriendo, todo me daba risa, y si me enojaba, no había quien me aguantara. Vos tenias un humor de mierda, te enojabas por todo, yo me reía y era peor. No sé porque, pero me daba risa ver tu cara de enojo, eras tan lindo, hasta parecías un poco torpe.
Supongo que te artaste de estar enojado, me hechaste la culpa a mí y por eso te fuiste. Cuando e realidad el del carácter podrido eras vos.
Quizá por eso te alejaste, también pensabas que era fría. A mi no me pareció. Pero puede ser cierto, no suelo mostrarme mucho. Es como si me costara. Pero yo sí te quería.
Odiaba vivir con vos, ahora sé que enrealidad me encantaba. Nunca la había pasado tan bien con nadie, eras el único que podía hacerme reir cuando estaba un poco triste.
Que se yo, eramos graciosos, nos divertiamos, me gustaba, no te aguantaba por alguna razón, y vos odiabas que yo fuese tan ciclotímica.
Te fuiste, me pareció genial (por una semana).
Ahora, te extraño un poco ( bueno bastante).
Lástima, te fuiste.

{ Pienso seguirlo un poco más }

lunes, 6 de abril de 2009

Concurso de Guiones (gané)

La cámara se enciende y aparece un primer plano de la cara de una mujer, joven. :
- ¡harta! ¡Harta de todo estoy! ¡Dios!, me cansa, no lo soporto, me saca, es ¡in-so-por-ta-ble! (Dice hablando rápidamente, haciendo gestos exagerados y mirando fijamente a la cámara). La cámara se apaga.

La cámara se prende de nuevo y en la escena hay un sillón floreado; en el sillón, esta Violeta sentada, mirando la televisión (la cámara filma todo desde atrás, es decir, a espaldas de Violeta). Se siente un ruido de una puerta que se abre, ella se da vuelta, mira, y sigue viendo la tv como si nada. Se acerca Martin, le da un beso en el cachete y le dice:
- Mi amorcito, mi sol, hermosa ¡buen día! ¿Me das un abracito?
Ella ni se inmuta, él sigue:
- Viole, mi chiquita ¿pasa algo?, decime mi amor, ¡viole! Viooooleeeeeeee…
Ella lo interrumpe:
- ¡Hay Martin para! ¡Te saludé! ¿no me escuchaste?
Él: - dale vio, ¡te pasa algo!, dale por favor (cara de preocupado)
Ella pone cara de que esta a punto de explotar; suspira y le dice, simulado un tono suave:
- No mi amor, no pasa nada (y sonríe falsamente).
Él pone cara de alivio y se va hacia la cocina. Ella se “hunde” en el sillón, se tapa la cara con un almohadón y grita: “AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA” mientras patalea. Se calla, se queda quieta.
Aparece una escena en cámara lenta; se ve a Violeta con una sonrisa de satisfacción zamarreando a Martin del cuello.


La escena se corta. (Vuelve a la anterior: Violeta quieta con el almohadón en la cara).
Martin se acerca y dice (Hablando rápido):
- Mi amor, ¿Estas cansada? ¿Queres que te haga un cafecito? O ¿Por qué no te das un baño mi sol? Así estas más fresquita. Yo ahora me voy, pero por unas horitas no mas, vos no…
Ella lo interrumpe:
- ¡Si! Chau, gracias. Me voy a bañar (le sonríe sarcásticamente, se levanta y se va).

La cámara la sigue por un pasillo. Se siente un ruido de puertas (Martin se fue). Ella se da vuelta, mira a la cámara, empieza a caminar rápido por todos lados (como nerviosa) y haciendo gestos exagerados dice (la cámara le hace un primer plano de la cara):
- No lo aguanto, ¡No lo aguanto! ¡Todo en chiquito! Mi amorcito, solcito, cafecito, unas horitas, fresquita, chiquita. ¡AAAAAAAAA que se calle! Por favorcito (lo dice haciendo comillas y con cara y tono de burla). ¡Dios!
La cámara se aleja, ella sigue caminando como antes, y dice:
- ¡Quien me mando! ¡Quién! Mi vida, mi amor, mi sol, chiquita, gordita, ¡Todo el santo día así!
(La cámara le hace un primer plano a la cara)
- Me cansé. Yo me voy, y punto.

La cámara se aleja, y muestra cómo ella entra en su cuarto y empieza a guardar todo en una valija. Empieza a caminar (la cámara la sigue de atrás) por un pasillo, se dirige a la puerta, la abre, sale, la cierra y la cámara queda mirando la puerta.

(Unos segundos). Entra Martin.
- Viooooooooooleeeeeeee, mi chiquita, ¡Llegueeee!.
Nadie le responde. El va al dormitorio (la cámara lo sigue), ve que las cosas de Violeta ya no están. Va hacia el sillón, se sienta. (La cámara lo filma desde atrás), suspira fuertemente.
La cámara le hace un primer plano de su cara, él mira fijamente y dice:
- Se fue. (hace una pausa)
Sonríe.
- Gracias a dios, no la aguantaba. Era in-so-por-ta-ble.

Se apaga la cámara.

miércoles, 1 de abril de 2009

Sick

Bien, sucede que de pronto estoy enferma. Sí, no sé bien que es lo que tengo, es algo extraño. Raro. Hasta incluso, da un poco de miedo. Ya casi no se si me eh convertido en una paciente psiquiatrica, o que. Pensar en esto, a veces me desespera, no logro entenderlo, casi no tiene lógica (ni un poquito). Quizá tenga alguna que otra respuesta sin sentido.
Bien, no creo que alguien pueda explicarlo, pues no eh escuchado a nadie padecer de esta enfermedad, o alguna patología semejante. Ojo, no crean que es mala mi nueva enfermedad, ni siquiera sé si es maligna o benigna. Tampoco sé si es terminal, definitiva, o se cura con el tiempo (como la gripe). Yo creo que no tiene receta, no sé. No conozco, me pasa y nada más.
Bien, no sé nada acerca de esta enfermedad, pero puedo contarte de que se trata:
NO IMAGINO EL MUNDO SIN ÉL; esa es mi nueva enfermedad.
(sí, no imagino el mundo sin vos)

lunes, 30 de marzo de 2009

Diario de algo así como un no sé

Ya ni siquiera sé como comenzó, como te encontré o si me encontraste; o si de casualidad me preguntaste la hora y yo, atontada, te miré. Fue hace algún tiempo atrás, yo estaba inundada en boludeces, no sabía bien para donde ir, caminaba sin mirar, escuchaba cosas sin sentido y me parecía que todo estaba bien. Nada estaba bien. Todo estaba normal, y yo lo notaba. Pero ¿para qué preocuparme?, claro así era yo, nada debía preocuparme, o molestarme demasiado para agradarme. Si algo no andaba bien, enseguida daba media vuelta y buscaba la forma de alejarme por completo e imaginar que todo eso que me desagradaba nunca había existido. Así todo era mas fácil, hasta algunos me preguntaban ¿cómo haces para estar siempre tan contenta?, y yo creía que me salía naturalmente; también solían acusarme de positivista, o de despreocupada, yo creía que envidiaban mi poder para minimizar las cosas que molestan, que engreída.
Imagínense, una vida normal, ni altos ni bajos, con lo suficiente para hacer, ni mucho ni poco, donde todo parecía estar bien y estaba dispuesta a todo y para todos: una vida perfecta. Si, como no. Yo creía lo mismo. De todas formas, no se sentía bien; directamente, no se sentía.
Así iba yo por la vida, nadie me decía nada, todo andaba como yo quería. Perfecto. No entendía como había personas que se preocupaban por cosas tan, tan insignificantes para mi (para mi), me parecía que los que se preocupaban era porque pretendían auto arruinarse el día. Que manera de perder el tiempo, pensaba.
Y claro, nunca pude tener una relación seria, porque todo me parecía tan estúpido, tan aburrido, tan fingido, que terminaba por cansarme, no les encontraba sentido. Además no quería encontrarme con todos esos conflictos de relaciones hombre-mujer que te complican la existencia, que si él te engaño, que no te llama, que si no viene vos no vas, pelotudeces.
Y vuelvo al principio, no sé bien como fue, pero te encontré. Estabas ahí, parado y no sé si mirando o esperándome (supongo que no, aunque a veces me gusta imaginar que inconscientemente nos estábamos esperando). Te vi.
Supongo que fuiste alguien más, no me acuerdo bien, pero me llamabas la atención. Cosa que no sucedía muy a menudo, si todo era igual. Eras diferente, mirabas diferente, caminabas diferente, y cuando te hablé, hablabas diferente. Diferente al resto, que para mí eran todos iguales, montoncito de personas con poca importancia. Y voy a aceptarlo, me gustaste. No sé si yo sabía que me gustabas, pero ahora sé que era así.
Empecé mal, te buscaba, te quería para mí, creía que te conocía (y en realidad lo único que sabía era tu nombre, que te gustaba Nirvana y Soda Estereo, y que tu hermana tenía mi edad), no podía esperar, te quería conmigo, como fuese, bien o mal, cerca o lejos, caprichosa por naturaleza quería todo ya. Y lo conseguí, pero todo así no más. A vos tampoco te importaba demasiado.
Que tarada.
Por supuesto, me molestaban tantas cosas de vos, pero yo me reía, lo que me molestaba ni lo miraba, si te le hacías el vivo a otra yo me moría de bronca, pero me hacía la que no importaba, ¿Para que hacer tanto problema? No, eso de los problemas a mi no me iba. Me acuerdo que peleábamos continuamente, yo quería todo como yo lo pensaba, era indiscutible, era una genia (sí, como no). Vos también tenias lo tuyo eh, eras medio pelotudaso. Igual eras el único que, a veces, me hacía pensar. Obviamente, nos alejamos.
Yo seguí con la mía, vos vivías la tuya. No te olvidaba, pero ya no me molestaba que estés con alguien, o que hagas algo, me daba lo mismo (como siempre), ya ni nos hablábamos. Pero yo te seguía, me acuerdo que te seguía pensando, me habías llamado la atención, casi que mi inconsciente te nombraba todo el tiempo, durante 7 meses miré fotos tuyas, sin decirte una sola palabra, durante 7 meses te crucé por ahí, vos no me veías. Hasta incluso una vez, fui a verte a la salida de un recital que habías ido a ver. Yo estaba de novia, no me importaba, te había ido a ver igual. Saliste, te vi, me quede callada y vos no me viste. Me acuerdo que una amiga me dijo: ¡Ahí esta¡ ¿le grito? ¡No! Le dije yo, “miralo esta riéndose. Que lindo.”
Sí, que extraño. Ya no actuaba como lo hubiese hecho unos meses atrás, haciendo un escándalo para que me vieras, y nada. Me quedé callada mirándote, fueron unos segundos. Después me di cuenta, de que era algo raro, algo había, y le decía a mis amigas “ya van a ver, yo voy a estar con el algún día, mucho tiempo”. Deliraba.
Paso algún tiempo, meses. Yo había cambiado, casi sin darme cuenta. Quería hablarte, pero no iba a hacerlo. No te iba a molestar. Un día, de la nada, hablamos (chateamos): 5 palabras. No se si fueron suficientes, pero a mi me pareció que no hablábamos para nada. Si nos hablábamos era porque queríamos algo, sí, yo ya sabia que quería algo, pero no sabia que. A lo mejor vos si. Nos hablábamos, poco pero nos hablábamos.
Un día me contaste algo importante, algo que te estaba pasando. Peleabas con tu mama, me acuerdo. Me dijiste que te gustaría estar conmigo en ese momento, yo estaba enferma y era tarde. De lo contrario me hubiese encontrado con vos. Estoy segura. Fue lindo haber hablado ese día con vos, yo tenía un poco de miedo de que todo quedase ahí, pero no estaba segura de que así fuese.
No se como ni porque, un día te escribí algo, y te lo mandé por mail. Decía algo que fue lo mas cierto que dije en mi vida. Yo no iba a molestarte, ni rogarte, simplemente iba a quedarme a tu lado, sin que te dieses cuenta, esperándote, esperando que reacciones, o no, pero que mientras, yo iba a hacer mi vida, era obvio que hiciese lo que hiciese siempre ibas a estar en el medio, yo te ponía al medio de todo, y no me molestaba. Sentía que algo tenía que pasar, fue raro.
Pasaron unos días, no muchos. Nos encontramos, me buscaste a la salida de un boliche, estaba helado, estábamos helados. Hablamos, poco, casi nada. Igual, yo te miraba y sonreía. Vos parecía que te morías de vergüenza.
Me acompañaste a buscar un remis, y cada uno se fue a su casa (en realidad, yo a la de una amiga). Cuando llegue, tenia un mensaje tuyo, decía algo lindo, no me acuerdo muy bien que, pero querías verme de nuevo. Yo te respondí y te dije que me gustaba estar con vos, que había sido lindo, en silencio o hablando. No se que paso en el medio, y un par de días después nos vimos.
No se en que momento paso todo, pero estábamos de la mano, sentados. Lo de la mano no era intencional, la excusa era que yo tenía frio. Que graciosos.
Yo me tenía que ir, nos despedíamos. Te di un beso en el cachete. Me agarraste la mano, me acerque, nos abrazamos, y nos besamos. Fue tierno. Gracioso. Lindo. Raro. Rápido.
Fue uno de esos días que uno después lo pone en la bolsa de los días mas lindos de tu vida, de ahí en mas no deje de verte. Al principio era todo medio frio, pero no tanto.
Te empezaba a querer, ya sentía lo que era extrañarte.
Hoy hace 8 meces y algo, que estamos juntos mi amor. Y no me arrepiento de nada, ni siquiera de haber sido una estúpida al principio. Porque asi y todo, estoy con vos. Y soy, y quiero ser la mujer mas feliz del mundo al lado tuyo.
Seamos felices.
Y ya te extraño mucho, asi que te voy a llamar (corro a llamarte!)
ME FUI.

domingo, 29 de marzo de 2009


Hace tiempo conocí a alguien, un chico, un buen chico.
Él me conto: tenía un problema, pero no uno de esos cualquiera. Estaba enojado con la vida,
se había cansado, la vida le daba la espalda continuamente, y estaba trizte. Lo escuché, me resulto extraño, vi algo en sus ojos, senti algo en su voz: no podía quedarme de brazos cruzados.
Decidí, algo iba a hacer. En un instante, sin pensarlo, fui a reclamarle a la vida, por él : le pedí que me dejara tomar su lugar, yo lo haría mejor que ella (o al menos lo intentaria). Ella lo dudó, pero logré convencerla enseguida.
Y tomé su lugar.
Él ahora me llama "su vida".
Yo ahora puedo verlo sonreir.
Creo que el cambio funcionó.
100 ENTRADAS !

jueves, 26 de marzo de 2009

Con el tiempo descubrí que hay personas hermosas y hay personas que no tanto, pero si mirás bien, te das cuenta de que no todas valen la pena.
Yo ya descarté, seguramente te toca a vos.

(prometo escribir algo mas largo)

lunes, 26 de enero de 2009

Soy tuyaa a!
Sos mí o !

Somos los más lindos, que jugamos a las




peleitas.






Vos porque sos mi vida,



y te quiero como a nadie, no te cambio por nada.



Si, te acoso porque sos mío.














'09



Principio, tu final. Y es tu drama nunca intentar.